Hace poco publicamos un artículo sobre el modelo de negocio de Uhrlaut Records, que combinaba las descargas gratuitas (y legales) con la venta de discos en las tiendas. Hemos tenido la oportunidad de charlar con Christian Villum, cofundador de este sello discográfico, quien nos ofrece una visión más amplia de las nuevas formas de trabajar en el negocio de la música.
La pregunta del millón de dólares es... ¿funciona? ¿Es viable, para los músicos y la propia compañía, un negocio discográfico basado en licencias Creative Commons?
Sí, estamos muy contentos de cómo funciona. Para dar a los lectores un rápido resumen: nuestro modelo de negocio es ofrecer descargas gratuitas en formato mp3 de todos nuestros lanzamientos (temas completos, en alta calidad), publicados con una licencia Creative Commons no-comercial (BY-NC-SA) y al mismo tiempo producir copias físicas (principalmente vinilos) que se distribuyen en tiendas (y los cuales animamos a los compradores a copiar gratuitamente también). Esto puede parecer contraproducente, pero en la práctica podemos ver que, cuantas más descargas gratuitas compartimos, más discos, conciertos y merchandising vendemos. Hay una correlación evidente. Además de esto, hay acuerdos para utilizar la música en medios audiovisuales (televisión, anuncios, etc.) y otras oportunidades que vienen de tener nuestra música flotando libremente en plataformas de Internet, cosas que nunca podríamos alcanzar a través de medios tradicionales. Somos un sello pequeño y decidimos no invertir presupuesto en marketing; en su lugar, utilizamos Internet para construir una comunidad global de entusiastas de la música a los que les guste nuestro estilo, y a los que conectamos a los artistas y la compañía a través de compartir música. Nuestra conexión se hace a través del amor a la música y el respeto mutuo, no estrategias de marketing. Además, no tenemos que preocuparnos por los territorios: al compartirla, nuestra música llega a gente curiosa que se une a nuestra tribu, no importa si están en Japón, Bangladesh o Alemania.
Vemos esto como un modelo de compañía mucho más sostenible en la era de Internet. Utilizar recursos para limitar la copia de archivos digitales no tiene sentido, y entendemos el compartir música como algo natural. Los modelos de negocio musical deberían construirse sobre esto, no en un ejército de abogados. Amamos la cultura de Internet y, entre otras, distribuimos música a través de The Pirate Bay, que es una herramienta increíble. ¿Por qué limitar la gente que va a recomendar tu música a un amigo? No hay mejor marketing que la recomendación de un amigo. Agradecemos a la gente que comparta nuestra música y los vemos como nuestros embajadores. Una descarga gratis no es una venta perdida en este momento, es una oportunidad potencial de conectar.
En otras palabras, lo único que podemos recomendar a las compañías y los artistas es experimentar con la economía compartida. A nosotros nos ha llevado de gira alrededor del mundo y ha sido una experiencia increíble. ¡Salid de vuestro autocontrol y aprovechad Internet!
¿Cómo se os ocurrió la idea?
Un amigo nos habló a mi y a mi socio fundador, Sune Peterson, sobre Creative Commons allá por 2006 o 2007 e inmediatamente nos intrigó el tema. Había mucha negatividad en el negocio de la música acerca de Internet y su maravillosa nueva tecnología, y yo estaba personalmente bastante molesto por la estrechura de miras y el egocentrismo que prevalecía en el mundo del negocio musical en general y dentro de las grandes discográficas en particular. Internet se veía como una amenaza, porque ellos estaban atrapados en su propia forma de hacer las cosas. Creative Commons era un soplo de aire fresco y finalmente se veía Internet como lo que es: el mayor regalo que cualquier creador de contenido creativo podría imaginar, y un teléfono con el que se puede llegar a millones de personas si lo utilizas bien. Así que nos lanzamos con todo el corazón y decidimos ir totalmente a contracorriente, gritándole al mundo “Por favor, copia este disco a todos tus amigos”. Incluso lo imprimimos en la parte de atrás de los discos, y eso fue noticia en muchos países. Esto iba totalmente en contra de las prácticas habituales en un momento en el que 99 de cada 100 discos llevaban impresos avisos contra la piratería. Fue un sentimiento fantástico tener alrededor de nuestras actividades una energía totalmente positiva hacia Internet cuando lanzamos el sello.
Obviamente nada de esto habría funcionado si nuestra lista de artistas, encabezada por Tone en aquel momento, no hubiese apoyado la idea. Así que una gran parte del crédito debe ir a ellos -Tone, Kiloton, Monolog, Periskop y los que vengan en el futuro- por ser también auténticos visionarios y estar dispuestos a probar nuevas fronteras para su arte. Son pioneros y sus discos son bellos hitos en la historia de la música que espero que continúen recibiendo elogios por mucho tiempo.
¿Piensas que las condiciones (legales, económicas, culturales...) en Dinamarca son más favorables para este modelo que en otros países?
No particularmente, excepto por el hecho de que la sociedad gestora de derechos danesa, KODA, es una de las pocas sociedades en el mundo que ha accedido a llevar a cabo un programa piloto que permite a sus miembros utilizar licencias no comerciales Creative Commons (las sociedades de gestión en Holanda y Francia son las otras que también lo permiten). Esto significa que los miembros pueden compartir su música libremente con fines no comerciales, y al mismo tiempo obtener beneficios de las emisiones en radio y otros usos comerciales. Esto es lo que nosotros hemos aprovechado, poniéndolo en práctica desde 2008 y hasta ahora. De hecho, nuestro primer lanzamiento aprovechando esta oportunidad llegó a las tiendas danesas dos días después de que se pusiese en marcha el programa piloto. Incluso recibimos un mensaje amenazante de la Sociedad de Artes Interpretativas de Dinamarca, porque todavía no habían oído hablar del programa. Fue un placer responder a ese email.
También debería mencionar que en Dinamarca hay algunos sistemas de financiación muy buenos, a los que los artistas y las empresas pequeñas pueden acogerse para recibir subvenciones públicas. Obviamente eso ayuda también mucho, aunque hay una dura competencia para conseguirlas.
¿Conoces otras discográficas (en Dinamarca u otros países) que sigan el mismo sistema de doble lanzamiento (descarga gratuita y venta en tiendas)?
Sí, conozco al menos una más: Father Figure Records, la cual, entre otros, publica música del gran Dad Rocks! Un grupo de gente con mucho talento. Sin embargo, me resulta extraño que no se haya adoptado más alrededor del mundo. Parece tan obvio en estos tiempos.
¿Cómo os afectan los servicios de streaming (como Spotify) o plataformas de distribución como Bandcamp? ¿Son competencia o nuevas oportunidades?
Indudablemente son una nueva oportunidad. Nos encantan -como nos encanta cualquier nueva plataforma que tenga éxito en llevar mucha música a mucha gente sin cargar grandes gastos. Honestamente, no nos preocupamos por las propias plataformas, sino por establecer una conexión entre los artistas y los fans de la música. Esa es la razón por la que, por ejemplo, hemos estado utilizando The Pirate Bay y otros sitios de torrents. ¡Nos encantan las buenas herramientas y las nuevas tecnologías!
Uhrlaut Records ha publicado cinco álbumes en cinco años. ¿Está relacionada esta producción tan limitada con el hecho de que cada trabajo tenga una buena presentación (audio y vídeo, por ejemplo)? ¿O es una decisión consciente el ser tan selectivos?
Bueno, Uhrlaut Records es un proyecto complementario para todos nosotros, así que tenemos un montón de otros proyectos al mismo tiempo (arte, tecnología, temas relacionados con Internet). Esto significa que ponemos toda nuestra energía y tiempo disponible en cada lanzamiento y dedicamos un año entero a producir, publicar y promocionar cada álbum. Cada uno de esos discos se merece ese tipo de atención y odiaría sentir que hay que hacer las cosas con prisas simplemente para cumplir con un número de lanzamientos.
Aunque, y llevo años diciéndolo, me gustaría ver este modelo de negocio adoptado por un sello con lanzamientos más frecuentes. Sería interesante y divertido verlo a lo grande.
Cuando buscáis nueva música para publicar, ¿buscáis vosotros a los artistas que os interesan, o recibís peticiones de artistas que ya están interados en publicar con licencias CC? ¿Es una iniciativa popular entre los músicos?
Es mayormente gente que encontramos y conocemos a través de nuestras redes musicales. No es que no recibamos un montón de demos, pero es infrecuente que lleguen a convertirse en lanzamientos. No es que no sea posible, será que no hemos recibido la demo adecuada todavía. Así que, si estás leyendo esto, no te sientas desanimado para enviarnos algo.
Small Arm of Sea es el único disco en vuestro catálogo publicado en cd, y el resto están sólo en vinilo y mp3. ¿Ha muerto el cd? ¿Estamos ya viviendo la paradoja de la coexistencia del vinilo y el mp3?
En nuestro mundo el cd está definitivamente muerto. Hace años que no toco uno. El vinilo, por otro lado, sigue creciendo y creciendo. Las imprentas se están extendiendo y las ventas crecen. Creo que a la gente le gusta la combinación de disfrutar de música digital online y en el móvil, y al mismo tiempo sumergirse más profundamente en algunos artistas y discos a través del vinilo. Yo los veo como dos productos complementarios. Lo siguiente que veremos será el ocaso del archivo mp3, cuando más y más gente se pase al streaming. Personalmente, transmito mucha música en streaming y me encantan plataformas como Soundcloud, Mixcloud y Spotify -y al mismo tiempo amplío mi colección de vinilos. Creo que esto se está haciendo muy popular entre los entusiastas de la música, también entre la nueva generación, que no estaban cuando el vinilo estaba ahí arriba antes de principios de los 90. Pienso que es muy motivador.
¿Cuáles son los planes de futuro para Uhrlaub Records?
Continuaremos editando buena y estimulante música electrónica e investigando con formatos, plataformas e Internet. También nos interesa buscar nuevos caminos experimentales, moviéndonos hacia nuevas áreas y campos adyacentes, así que si alguien leyendo esto tiene buenas ideas, dadnos un grito.
Y si sois un artista o un sello, dejadme decirlo una vez más: ¡salid de vuestros límites y adoptad la cultura de compartir!